Alfonso de Portago, el "Gentleman Driver" español
“Si muero mañana habré vivido 28 años maravillosos”
Probablemente, si este personaje
hubiese sido norteamericano o inglés, ocuparía en la historia uno de los
peldaños más altos, en lo que a mitos se refiere y existirían numerosas biografías
y films sobre su vida.
Alfonso de Portago, VIII Marqués
de Portago, fue un Gentleman driver
de los años 50. El primer piloto español en pilotar para la Scuderia Ferrari y primer piloto español
en participar en una carrera de Fórmula 1, en aquella época en la que los
deportes de motor eran solo para los valientes y para temerarios.

El Marquesado de Portago, creado
por el rey Felipe V el 13 de octubre de 1744, es un linaje nobiliario español
heredado por Alfonso Antonio Vicente
Eduardo Ángel Blas Francisco de Borja Cabeza de Vaca y Leighton, popularmente
conocido como el Marqués de Portago, probablemente el más glamuroso y conocido
de los marqueses de Portago. Fon, como era conocido en su círculo de amigos,
era descendiente directo del conquistador Alvar Núñez Cabeza de Vaca y
descubridor de la Florida. Alfonso era nieto de Vicente Cabeza de Vaca y
Fernández de Córdoba, ministro de Instrucción Pública y alcalde de Madrid.
Fon era muy cercano de otro
ilustre automovilista español, el rey Alfonso XIII, del que heredó el nombre
debido a la amistad que le unía a su padre con él. El rey a su vez era padrino
de bautismo de Fon, el cual tenía una gran amistad con Don Juan de Borbón,
heredero del trono español.
SU VIDA

Su carácter de aristócrata
millonario, seductor de mujeres, amante del riesgo y personalidad rebelde, le
otorgaron la etiqueta de “Gentleman driver”, que era como se conocía a los
pilotos por aquella época en la que la gran mayoría de ellos eran millonarios
seductores, procedentes de las altas esferas de la sociedad.



SU ÚLTIMO BESO
Alfonso era conocido por el
estilo de vida que llevaba, su chaqueta de cuero y su barba de tres días. La
temeridad de la que hacía gala se materializa en una entrevista de radio en la
que pronuncia la que quizás sea su frase más conocida “Si muero mañana habré vivido 28 años
maravillosos”,
pronunciada tiempo antes de su accidente mortal en Guidizzolo, mientras corría
en las Mille Miglia del 57.

En un telegrama enviado el 8 de
mayo (cuatro días antes de su muerte) comenta que “En Ferrari me fuerzan a
correr las Mille Miglia, primero me dijeron que tenía que hacerlo con un Gran
Turismo pero después de mi primera vuelta de entrenamiento me dijeron que tenía
que hacerlo con el 3800 sport y hoy me han anunciado que Taruffi y yo tenemos
los nuevos 4000 cc, que mierda pero pienso ir en plan Turismo, ni siquiera Gran
Turismo”. Quizá como premonición
de lo que estaba por venir.
En la XXIV edición de las Mille Miglia de aquel año, se conmemoraba el
treinta aniversario del inicio de la competición, que tenía un recorrido de
1700 kilometros con principio en Brescia, bajando hacia el sur por el
Adriático, para atravesar Roma y subir por los Apeninos, para finalizar de
nuevo en Brescia.
El marqués, a su paso por Roma, cometió la frialdad de detener el coche
cuando vio a Linda Christian, su amante por
aquel entonces, aparecer entre la multitud haciéndole una seña con la mano.
Cuando Linda llegó a su lado, la besó mientras murmuraba algo a su oído.
Esto le supuso la pérdida de unos valiosos segundos. Linda le dijo adiós con la
mano viendo a Fon enfilar la carretera hacia Guidizzollo. ¿Quizá fue una
premonición de Fon? Fue su último beso.
En Guidizzollo, emplazado en el valle del Po, a escasos kilómetros de la meta de Brescia, la carretera se estrechaba atravesando el pueblo. Los alrededores de este estaban repletos de gente ansiosa por ver los bólidos trazar por las angostas carreteras de la población. Fon había detectado en el último control de tiempo una avería en una de sus ruedas, pero decide no cambiarlas para evitar la pérdida de tiempo y no perder el tercer puesto provisional que ostenta en ese momento.

Diez personas mueren en el accidente, junto a Fon y su copiloto, su
gran amigo Edmund Nelson, además de un gran número de heridos. La repercusión
mediática del accidente de Portago consiguió acabar con las carreras en ruta y
no sería hasta finales de siglo, en la que las Mille Miglia serían recuperadas
como carreras de clásicos, con un carácter menos competitivo.
Biografías:
Palmarés y carreras disputadas: http://www.elenaferrari.net/portago.html
Transcripción de la entrevista
realizada a Fon:
1 comentarios:
Precioso el relato de esta figura injustamente olvidada.
No obstante, y en honor a la verdad, Alfonso de Portago ni fue el primer español en la Scuderia Ferrari ni el primero en participar en el mundial de Fórmula 1, honores que corresponden, respectivamente, a Julio González Pola y Francisco Godia.
Gracias por el relato y un saludo cordial.
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